VisualThinking, rutinas de pensamiento y mejora de la atención
Los problemas de atención, memoria de trabajo, planificación y metacognición son algunas de las dificultades de aprendizaje que más observamos en las aulas de educación primaria.
Reflexionando con mis compañeros identificamos tres momentos claves en la organización del aula:
1. Al comenzar la clase: el proceso clave es la Orientación a la tarea. Los alumnos llegan distraídos, muchos están centrados en la relaciones sociales (lo que pasa en la clase), otros no les interesa la materia, otros están con la cabeza en otros sitio.
2. Al comenzar la explicación del tema o contenido a aprender: muchos alumnos oyen pero no escuchan. Están callados pero su cabeza no está haciendose preguntas, no se interrogan, Escuchan pero no relacionan.
3. Al finalizar la clase: el proceso clave es recapitulación o metacognición. Observamos que muchos acaban la clase igual que han empezado. Acaban y olvidan, no retienen en la mente las idean importantes, ni dedican un minuto a resumir lo más importante.
Por este motivo y para mejorar los procesos atencionales, de planificación y memoria, pensamos que las rutinas de pensamiento podían ayudarnos a realizar un trabajo sistemático con la participación del todo el profesorado que interviene en el aula. Las propuestas fueron las siguientes:
1. Al comenzar la clase:
Rutina de pensamiento: OBJETIVO DEL DÍA
El docente se encarga de enunciar cuál es el objetivo u objetivos (2 como máximo) para esa sesión. El alumnado lo escribe en su cuaderno y ese objetivo lo tenemos en la mente toda sesión. Se enuncia en positivo y es muy concreto. Por ejemplo: Soy capaz de realizar divisiones de fracciones. Soy capaz de comprender cómo funciona el aparato digestivo. Soy capaz de escribir un microrrelato.
2. En el momento de realizar la presentación de un contenido
Rutina de pensamiento: VEO-PIENSO Y ME PREGUNTO
No queremos que sean pasivos, queremos que se hagan preguntas. Podemos dirigir su atención haciéndoles conscientes de qué están pensando y qué les gustaría aprender. Según el área y la actividad las preguntas serán diferentes.
3. Los últimos 5 minutos de clase
Rutina de pensamiento: TITULARES O QUÉ HE APRENDIDO HOY.
Queremos que aprendan a resumir, que centren su atención en los importante, que reflexionen sobre lo que ellos han interiorizado. Con esta actividad el docente se hace una idea que lo que ha quedado en los alumnos al acabar la clase. Se supone que lo que los han alumnos han aprendido y el obejetivo del día tiene que coincidir. Aunque en ocasiones, los alumnos han hecho conexiones que nosotros no esperábamos, mejorando el aprendizaje. Otras veces, nos damos cuenta que no han comprendido nada de lo explicado.
Realicé una presentación que me gustaría mejorar pero aquí la comparto para comprender mejor la propuesta realizada.
Reflexionando con mis compañeros identificamos tres momentos claves en la organización del aula:
1. Al comenzar la clase: el proceso clave es la Orientación a la tarea. Los alumnos llegan distraídos, muchos están centrados en la relaciones sociales (lo que pasa en la clase), otros no les interesa la materia, otros están con la cabeza en otros sitio.
2. Al comenzar la explicación del tema o contenido a aprender: muchos alumnos oyen pero no escuchan. Están callados pero su cabeza no está haciendose preguntas, no se interrogan, Escuchan pero no relacionan.
3. Al finalizar la clase: el proceso clave es recapitulación o metacognición. Observamos que muchos acaban la clase igual que han empezado. Acaban y olvidan, no retienen en la mente las idean importantes, ni dedican un minuto a resumir lo más importante.
Por este motivo y para mejorar los procesos atencionales, de planificación y memoria, pensamos que las rutinas de pensamiento podían ayudarnos a realizar un trabajo sistemático con la participación del todo el profesorado que interviene en el aula. Las propuestas fueron las siguientes:
1. Al comenzar la clase:
Rutina de pensamiento: OBJETIVO DEL DÍA
El docente se encarga de enunciar cuál es el objetivo u objetivos (2 como máximo) para esa sesión. El alumnado lo escribe en su cuaderno y ese objetivo lo tenemos en la mente toda sesión. Se enuncia en positivo y es muy concreto. Por ejemplo: Soy capaz de realizar divisiones de fracciones. Soy capaz de comprender cómo funciona el aparato digestivo. Soy capaz de escribir un microrrelato.
2. En el momento de realizar la presentación de un contenido
Rutina de pensamiento: VEO-PIENSO Y ME PREGUNTO
No queremos que sean pasivos, queremos que se hagan preguntas. Podemos dirigir su atención haciéndoles conscientes de qué están pensando y qué les gustaría aprender. Según el área y la actividad las preguntas serán diferentes.
3. Los últimos 5 minutos de clase
Rutina de pensamiento: TITULARES O QUÉ HE APRENDIDO HOY.
Queremos que aprendan a resumir, que centren su atención en los importante, que reflexionen sobre lo que ellos han interiorizado. Con esta actividad el docente se hace una idea que lo que ha quedado en los alumnos al acabar la clase. Se supone que lo que los han alumnos han aprendido y el obejetivo del día tiene que coincidir. Aunque en ocasiones, los alumnos han hecho conexiones que nosotros no esperábamos, mejorando el aprendizaje. Otras veces, nos damos cuenta que no han comprendido nada de lo explicado.
Realicé una presentación que me gustaría mejorar pero aquí la comparto para comprender mejor la propuesta realizada.
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